Ahora el turno es de Stephen Wolfram, otro iluminado de la física que intenta explicar el universo.
La búsqueda de una teoría del todo suena a ratos como la medieval pesquisa de la Piedra Filosofal. Y parece aún más extraño cuando todavía no entendemos completamente al coronavirus. Somos criaturas que construyen mitos. No importa la naturaleza, mitos religiosos, filosóficos o científicos, irracionales o rigurosamente lógicos. Nuestra especie demanda meta-relatos que cuenten como fue en el principio y de dónde proviene todo.
¿Pero por dónde vamos desde que Tales de Mileto propuso al agua como el principio fundamental de todas las cosas? Actualmente, la descripción de las fuerzas fundamentales del universo se divide en dos tajadas. Por un lado está la Relatividad General, que describe la naturaleza de la gravedad que domina la física a escala astronómica. En la otra esquina tenemos la Teoría Cuántica que describe las otras tres fuerzas y explica la física de partículas.
Stephen Wolfram intenta la unificación
La unificación de estas teorías ha sido imposible hasta ahora porque las dos están formuladas dentro de diferentes marcos matemáticos. Las poderosas fuerzas que rigen la escala subatómica son irrelevantes a nivel macroscópico.
A esta incompatibilidad se le suman otras cuestiones por resolver. El origen de la materia oscura, de la energía oscura y las masas de neutrinos generan preguntas que son necesario responder. Una teoría fundamental tendría que aportar esas respuestas.
Puedes leer: La IA descubre la halicina, un antibiótico contra las súperbacterias
En este escenario aparece el londinense Stephen Wofran con su particular aporte para buscar una teoría del todo. Wolfram comenzó su carrera en la física, pero es en la informática donde ha ganado más renombre. Recibió su doctorado en física de partículas teóricas a la edad de 20 años. Pero tempranamente se alejó de la física para dedicarse al desarrollo del código Wolfram. Luego funda su compañía Wolfram Research donde surgió el lenguaje computacional Wolfram que es la base del software Wolfram Mathematica.
Un modelo computacional del universo
En 2002, Stephen Wolfram publicó, ”A Nuevo Tipo de Ciencia”, que introduce el estudio experimental de sistemas simples de cálculo. La tesis principal es que los programas simples, pueden generar sistemas muy complejos. Y lo hacen mediante la aplicación repetitiva de una regla simple. Afirma además que estos sistemas pueden describir todo el mundo físico y que el propio universo es computacional.
Ahora, en medio de la pandemia, Wolfram nos presenta “Un Proyecto para Encontrar la Teoría Fundamental de la Física”. La idea principal se mantiene. La complejidad del universo puede ser descrita a través de un algoritmo informático que funciona aplicando una regla simple.
El universo es un hipergrafo
Mediante un modelo computacional, Stephen Wofran construye estructuras que llama “hipergrafos”. En ellos el espacio es definido por un nodo, y el tiempo corresponde básicamente a las actualizaciones progresivas. En esta representación hipergráfica del universo el tiempo y el espacio dejan de ser continuos. Ahora son entidades discretas. En su modelo computacional Wolfram asegura reproducir principios básicos de la relatividad general y la mecánica cuántica.
Puedes leer: IOTA dice Ready Player One y toca al Julio Verne del siglo XX
Muchos físicos han reaccionado con receloso respecto a este ambicioso proyecto. Entre otras cosas por la imposibilidad de su comprobación fáctica. En este aspecto, nos recuerda el talón de Aquiles de la Teoría de Cuerdas: Las evidencias. En la comunidad científica aunque la elegancia y la belleza de las teorías es reconocida. Hace falta la comprobación para consolidar las propuestas.
Lo que no se puede negar es la potencia y el vuelo de su intuición. Después de todo, hace rato ya que la física sueña con un nuevo paradigma.