Un teatro a oscuras continuó su espectáculo la pasada semana; el apagón dejó a oscuras la ciudad cuando en la sala Trasnocho había pasado ya una hora de la obra “Terror”. Los actores siguieron adelante a oscuras del teatro.
El impacto cultural fue gigante ya; que en el mundo del espectáculo es inaceptable que haya interrupciones por un servicio tan esencial como la electricidad.
Teatro oscuras, reacción de los espectadores
La ciudad de Caracas se veía visitada por grupos famosos como el Piccolo Teatro di Milano, La Fura dels Baus, La Zaranda, el Odin Teatret de Copenhague, La Cuadra de Sevilla, la compañía de Tadeuz Kantor; figuras como Lindsay Kemp, Peter Brook, o Kazu Ohno.
En menos de una década; la confluencia que hizo la masa crítica y moldeó la masiva adicción al teatro en todas sus formas que hoy define a los ciudadanos de Caracas.
Esta ciudad no ha renunciado al teatro a pesar de los cortes de luz. Esta ciudad se caracteriza por su Actividad nocturna por excelencia; ni el toque de queda decretado desde hace años por los malechores y, últimamente; tampoco el apagón es que la dictadura militar inepta pretende imponer al país en todos los lados. Pero sin embargo; han hecho decaer la afluencia de público a los teatros.
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También es justo decir que su gente de teatro ha dado la talla para ser potenciales actores; por cómo pudieron demostrar los actores que participaron en el show de el “Terror” en el teatro a oscuras.
La popular obra propone al público enjuiciar a un piloto de guerra con órdenes de derribar un avión de pasajeros secuestrado por terroristas que ;se disponen a estrellarlo contra un estadio de fútbol repleto de espectadores.
La popular pieza, que en Caracas, contra viento y marea; ha cumplido ya con más de 100 funciones sigue con la trama siguiendo la liturgia de un juicio con jurado: testigos que declaran; fiscales y abogados que alegan. Es la pieza de el alemán Schirach el jurado es el público que, al final; vota en una urna por un veredicto de culpabilidad o inocencia.
El sábado 30 de marzo el apagón dejó a oscuras la ciudad cuando en la sala Trasnocho había transcurrido ya una hora de función. Sorprendidos, los actores callaron momentáneamente; pero el instinto que llevan por dentro los llevó a seguir adelante, dialogando en la tiniebla. Dejando a todos con la boca abierta.
Fuente: Redacción /El País
