En el pequeño país del sudeste asiático, se usa un sistema legal dual; el que se comprende por la implementación de normas comunes y la sharía. La interpretación de estas últimas, se hizo más rígida, desde el pasado 3 de abril, cuando el Sultán de Brunei, aprobó la legalidad de la condena de muerte por lapidación a los homosexuales y a los adúlteros.
La Sharía, que es el conjunto de normas religiosas, impera en el territorio de Brunei; pues dos tercios de su población, son fieles musulmanes. Principalmente se centraba en sancionar crímenes, con sentencias de prisión y multas.
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Luego del 3 de abril, entro en vigencia un nuevo cumulo de crímenes y penas, impuestos por el Sultán de Brunei; con el que se pretendió castigar la homosexualidad y el adulterio, con una pena de muerte por lapidación.
Matar a los homosexuales y a los adúlteros a pedradas es un punto definitivo para la cultura democrática; por esto, distintas personalidades reaccionaron, entre estos, George Clooney; quien insto a las personas a boicotear algunos recintos hoteleros en los que el Sultán de Brunei ejerce acciones.
El sultán de Brunei retrocedió en su decisión
En el país, se dio un paso atrás; ante la reacción del mundo al ver su decisión de castigar con pena de muerte la homosexualidad y el adulterio.
El sultán de Brunei, Hassanal Bolkiah, suspendió por medio de una moratoria; la aplicación de la pena de muerte por la ley islámica en el país.
Sin embargo, hace menos de un mes; se retomaron las ejecuciones en el país y se retiró la moratoria. Agregando a esto, en un discurso, el sultán agrego que el “merito” de las nuevas leyes se volvería evidente; a pesar de las “malas percepciones”.
Fuente: BBC/Redacción
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